El establecimiento de la Iglesia

Introducción:



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A.   Jesús les anuncio a los apóstoles que el edificaría su iglesia (Mt 16:18). En aquel entonces su establecimiento fue futuro “Edificare”.

B.   Mas tarde se declara que “Y se apodero un gran temor de toda la iglesia” (Hch 5:11). Así se ve que entre la promesa de Cristo para edificarla y la declaración de Lucas que ya estaba en existencia, la iglesia tuvo que haber sido establecida. El propósito de esta lección es seguir el establecimiento de la iglesia de Cristo.

I. Los términos IGLESIA y REINO están interrelacionados

La palabra “reino” es definida por diferentes lexicógrafos con el significado primordial de poder real, monarquía, reglamento, reino; el significado secundario abarca territorio o reino. El significado primordial permite la comprensión de un numero de escrituras en donde la idea del reino nos confunde o no nos comunica adecuadamente acerca del reino autoritativo de Cristo (Dan 7:27, Mt 5:10, 16:28, Jn 3:3, Lc 17:20-21, Ro 14:17, He 12:28). En otras escrituras se enfatiza el término reino (Dan 4:25, Mt 4.8, Jn 3:5, Ap 5:9-10).

Por otro lado la palabra “iglesia” no siempre tiene los alcances de la palabra “reino”, ambas están interrelacionadas inseparablemente y lo han sido desde el establecimiento de la iglesia, en la promesa de Cristo: “Edificare mi iglesia… Te daré las llaves del reino de los cielos” (Mt 16:18-19).

Es esencial ver la interrelación de la iglesia y el reino de Cristo para entender que con el establecimiento de la iglesia vino también la comprensión del reino del Antiguo Testamento. En la iglesia, los judíos encuentran cumplidas todas las promesas hechas a Israel. Es la iglesia por la cual Cristo ejerce sus reino y por la cual el manifiesta su reino soberano (Ef 1:19-23).

Es la iglesia que recibe el reino (He 12:28). La iglesia es el reino de Cristo que se compone de personas que voluntariamente se han unido a ella en la tierra y manifiestan su reino en los corazones por su obediencia a la fe. No se ve el reino como un desarrollo futuro. El reino es un hecho actual.

A.   Jesús interrelaciono los términos (Mt 16:18-19).

B.   Los dos se componen de los santos.

1.   Pablo escribe “a la iglesia de Dios que esta en Corinto, a los santificados en Cristo Jesús llamados a ser santos” (I Co 1:2).

2.   La iglesia se compone de “santos”. A los colosenses él les dice que los ha capacitado “para participar de los santos en luz; el cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado al reino de sus amado hijo” (Col 1:12-13).

3.   Los santos están trasladados al reino.

4.   Ya que se componen tanto la iglesia como el reino de los santos, ellos deben ser iguales.

C.   Tanto la iglesia como el reino se componen de hombre comprados por sangre.

1.   Hechos 20:28 habla de “la iglesia de Dios que el compro con su sangre”. Sabemos, por supuesto, que la iglesia es el conjunto de gente salvada, gente salvada por la sangre. Juan dijo de Cristo “y con tu sangre compraste para Dios… y has hecho de ellos un reino” (Ap 5:9-10).

2.   El reino también se compone de hombres comprados por sangre. Ya que se componen tanto el reino como la iglesia, de hombres que han sido comprados por sangre, ambos deben ser iguales.

D.  Los sacerdotes de la casa espiritual de Dios son los sacerdotes en el reino.

1.   La iglesia es la casa espiritual de Dios (I Ti 3:15). Se construye la casa espiritual de sacerdotes santos (I pe 2:5).

2.   Se compone el reino de aquellos sacerdotes (Ap 1:6, 5:9-10).

3.   Por tanto, la iglesia, la casa de Dios, es el reino de sacerdotes.

II. El reino estaba cerca durante los ministerios de Juan y Jesús

Los documentos del evangelio nos cuentan que la hora del reino estaba muy cerca durante los ministerios de Juan el Bautista y Jesús.

A.   EL reino de Dios estaba cerca.

1.   Este fue el mensaje de Juan el Bautista (Mt 3:1-2).

2.   Fue también el mensaje de Jesús (Mt 4.17, Mc 1.15).

3.   El mensaje que Jesús mando a los doce (Mt 10:1, 7).

4.   El mensaje que Jesús mando a predicar a los setenta (Lc 10:1, 9).

5.   Cuando algo “se ha acercado”, esta cerca. Si el reino de Dios no esta aquí ahora, entonces no estaba cerca cuando Juan, Jesús, los doce, y los setenta dijeron que estaba.

B.   Algunos de los que oyeron a Jesús vivirían para ver la venida del reino (Mc 9:1).

1.   Si el reino no ha venido, ¡Hay algunos hombres que deben tener unos 2000 años!

2.   Más Cristo no hablo tonterías.

III. El poder y el lugar del reino predicado por Cristo

A.   El poder. Marcos 9:1 documenta que Jesús les anunció a “algunos de los que están aquí (que) no gustarían la muerte hasta que hayan visto el reino de Dios venido con poder”. En Hechos 1:8 él les dijo a los apóstoles que deben “recibir poder, cuando venga el Espíritu Santo sobre ustedes”. El reino iba a venir con poder en la ciudad de Jerusalén.

B.   El lugar. Inmediatamente antes de la ascensión de Cristo, el instruyo a los apóstoles a regresar a Jerusalén y “quédense en la ciudad hasta que hayan sido revestidos del poder de los alto” (Lc 24:49). El Espíritu iba a revestirlos con poder en la ciudad de Jerusalén.

IV. El día y la hora del establecimiento del reino

A.   El día de Pentecostés (Hch 2:1).

B.   La tercera hora del día (Hch 2:15) o a las nueve de la mañana. Tal fue la respuesta de Pedro a las multitudes que estaban intrigadas acerca de la fuente del poder del apóstol al hablar idiomas diferentes. No estaban borrachos, como algunos dijeron (v.13); era muy temprano en la mañana.

V. El establecimiento del reino, la iglesia

A.   Cristo predijo que el reino vendría con poder, y que aquel poder vendría cuando el Espíritu Santo viniera. Hechos 2:1-4 documenta la venida del Espíritu sobre los apóstoles como fue predicho. Por los tanto, el reino vino.

B.   Cuando el Espíritu Santo fue derramado, los apóstoles fueron autorizados por el concejo divino. Predicaban que Cristo Jesús había sido crucificado, sepultado, y levantado, que este fue el cumplimiento de las profecías del Antiguo Testamento. Los apóstoles convencieron a los judíos que los oyeron predicar y, cuando preguntaron que es los que debían hacer, les mandaron arrepentirse y ser bautizados para el perdón de sus pecados y recibirían el don del Espíritu Santo (Hch 2:38). El v.41 documenta que “los que recibieron su palabra fueron bautizados”. Acuérdese que somos bautizados en la iglesia. Hechos 2:47 concluye por decir, “y el Señor añadía cada día a la iglesia los que habían de ser salvos”.

C.   Por lo tanto el reino vino cuando el Espíritu Santo vino con poder, y el segundo capítulos de Hechos documenta el establecimiento de la iglesia, vino el reino de Cristo para la redención de la humanidad. Su establecimiento fue en la ciudad de Jerusalén alrededor de las nueve de la mañana. La iglesia de Cristo tiene mas de mil novecientos años. No es nueva ni creada por el hombre.

Conclusión:

A.   Otra vez, los marcos de identidad del Nuevo Testamento se presentan: La hora, el lugar, el poder, el día del establecimiento.

B.   No estamos preocupados  por reconstruir una línea de sucesión de los apóstoles hasta hoy, sino de identificar la iglesia de Cristo revelada en el Nuevo Testamento y que puede ser restablecida en la actualidad.