E. Censura por la falta de sabiduría espiritual, según se hacia evidente por sus divisiones carnales (3:1-4).
1.“De manera que yo, hermanos, no pude hablaros como a espirituales , sino como a carnales”. Los hermanos dependían de los hombres inspirados para ser espirituales, pero no les podía hablar como si hubieran sido inspirados por el espíritu porque estaban siendo guiados por los impulsos de la carne.
2.“Como a niños en Cristo”. No habían crecido. Bajo la instrucción del Espíritu, la carne pierde su control, pero ellos estaban aprendiendo muy despacio.
3.“Os di a beber leche”. La leche espiritual solo sirve en la etapa de niñez, no asegura un crecimiento satisfactorio.
4.“Por que no erais capaces”. Había transcurrido suficiente tiempo para que ya hubieran alcanzado un crecimiento vigoroso y saludable, pero ellos no habían mejorado ni crecido en la vida espiritual como debieran haberlo hecho, así que eran niños, incapaces de recibir la comida espiritual más sólida.
5.“Ni sois capaces todavía”. Los hombres fallan en mejorarse a sí mismos, porque cuando ya deberían de ser expertos en la palabra, comer alimento sólido y crecer, ser fuertes y capaces de llevar cargas pesadas para poder ayudar a otros, éstos son aún infantes débiles, necesitando ellos mismos ser alimentados con leche y ser cargados por otros.
6.“Por que aun sois carnales”. Ellos no habían salido de debajo del poder de las pasiones carnales.
7.“pues habiendo entre vosotros celos, contiendas y disensiones, ¿no sois carnales, y andáis como hombres”. Esto se refiere a los partidos mencionados en 1:11-12. Todos estos partidos nacen de la predominación de las obras de la carne (Gal 5:19-21).
8.“Porque diciendo el uno: Yo ciertamente soy de Pablo; y el otro: Yo soy de Apolos, ¿no sois carnales?”. Él pone delante de ellos la verdad, diciéndoles que las divisiones y partidos, aún para hombres inspirados, son pecado, y nacen de los deseos y pasiones de la carne.
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